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Cosos 2
~Roderick Meier~
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~Roderick Meier~
Lo básico…
“Entré vacilante en aquella habitación, algo desconfiado y quizás más que eso, asustado. Y, bueno, era difícil no estarlo… ¿Qué demonios era eso?
Nunca, pero nunca me había topado con algo así… ¿Qué cosa eres? Pregunté cerrando los ojos para reajustar de alguna manera su imagen. Solo escuché su risa. No planeaba responder.
Ya no sabía que pensar. Quise correr pero ya era tarde. La puerta se había cerrado de golpe y esa cosa estaba a mi lado, invitándome a seguir. Espero salir de esta, aun hay cosas que quiero hacer… debería pensar eso, pero no es así.
… Ya no tengo nada por lo que seguir…”
Nunca, pero nunca me había topado con algo así… ¿Qué cosa eres? Pregunté cerrando los ojos para reajustar de alguna manera su imagen. Solo escuché su risa. No planeaba responder.
Ya no sabía que pensar. Quise correr pero ya era tarde. La puerta se había cerrado de golpe y esa cosa estaba a mi lado, invitándome a seguir. Espero salir de esta, aun hay cosas que quiero hacer… debería pensar eso, pero no es así.
… Ya no tengo nada por lo que seguir…”
Nombre Completo: “Todos tiene uno, ¿Por qué tu serias la excepción?”
¿Mi nombre? – Pregunté idiotamente mientras me sentaba frente a él. Parecía mirarme fijamente a los ojos. Eso sentía incluso sin ver los suyos. Cerré los ojos nuevamente, no quería que sus bruscos movimientos me causaran inconvenientes – Me llamo Roderick… Roderick Meier, es un placer… creo… - Ladee la cabeza, no estaba convencido -
Apodo: “Algún nickname, sobrenombre, insulto o como sea que te digan. No es obligación tenerlo, aunque claro, pensaría que te quieren poco~”
Mi familia siempre me ha tratado por Rode – Pensé un poco en aquello, baje la cabeza cruzándome de brazos. Tenía otros apodos pero eran algo vergonzosos como para decirlos frente a este… desconocido – debe bastar así, ¿no?
Inclinación Sexual: “Hacia donde miras~ Oh, vamos, ni tú crees el ser normal, ¡Confiesa!”
Bueno… ¿Para qué quieres saber algo así? – Debo confesar que me sorprendió la pregunta, no por timidez o porque lo ocultaría toda la vida – Soy homosexual… Disculpa… ¿Tienes algún genero? O sea… entiendes, ¿No? – Abrí los ojos solo por segundos, su risa lleno la sala. Que idiota soy – No importa… - Bajé la mirada cerrando los ojos nuevamente -
Raza: “Es lo más importante, ¿Qué rayos eres?”
Qué extraña pregunta… bueno… tal vez no tanto. Soy… ¿Humano? – Me había confundido… acaso… además de los humanos y “esa cosa” ¿existían otros tipos de seres? -
¿Mi nombre? – Pregunté idiotamente mientras me sentaba frente a él. Parecía mirarme fijamente a los ojos. Eso sentía incluso sin ver los suyos. Cerré los ojos nuevamente, no quería que sus bruscos movimientos me causaran inconvenientes – Me llamo Roderick… Roderick Meier, es un placer… creo… - Ladee la cabeza, no estaba convencido -
Apodo: “Algún nickname, sobrenombre, insulto o como sea que te digan. No es obligación tenerlo, aunque claro, pensaría que te quieren poco~”
Mi familia siempre me ha tratado por Rode – Pensé un poco en aquello, baje la cabeza cruzándome de brazos. Tenía otros apodos pero eran algo vergonzosos como para decirlos frente a este… desconocido – debe bastar así, ¿no?
Inclinación Sexual: “Hacia donde miras~ Oh, vamos, ni tú crees el ser normal, ¡Confiesa!”
Bueno… ¿Para qué quieres saber algo así? – Debo confesar que me sorprendió la pregunta, no por timidez o porque lo ocultaría toda la vida – Soy homosexual… Disculpa… ¿Tienes algún genero? O sea… entiendes, ¿No? – Abrí los ojos solo por segundos, su risa lleno la sala. Que idiota soy – No importa… - Bajé la mirada cerrando los ojos nuevamente -
Raza: “Es lo más importante, ¿Qué rayos eres?”
Qué extraña pregunta… bueno… tal vez no tanto. Soy… ¿Humano? – Me había confundido… acaso… además de los humanos y “esa cosa” ¿existían otros tipos de seres? -
Háblame de ti…
“¡¡Aaaaaahhh!! Solo llevaba unos minutos con él y ya me sentía confundido, como si todo en lo que he creído se perdiera de golpe. Caía al vacio rápidamente y no tenia de que sostenerme. ¿Qué sucedía en esta ciudad?... No debí venir, debí escucharlo… Quizás si era un error creer que aquí podría iniciar una nueva vida, lejos de las discriminaciones… lejos de él y los dolorosos recuerdos.
Debí quedarme en esa clínica…”
Edad: “Sorprenderás a muchos, ¿No?”
Tengo veintiséis años, no sé si los aparento o no, pero considero que es lo de menos. Al menos, pienso como un adulto – Asentí, aun con los ojos cerrados, confiado. A mi parecer siempre he sido maduro. Quizás se deba al tipo de conducta que tengo o solo es una mísera suposición -
Cumpleaños: “¿Cuándo comenzó tu existencia? Danos fecha~”
Es el 15 de septiembre – Respondí sin pensar. Era una pregunta normal, no había nada extraño en responderla -
Nacionalidad: “Lugar de Origen, dah.”
Suiza – Sonreí enérgicamente, me gustaba mi país, claro muchos son gritones y tienen un genio de los mil demonios, gracias al cielo yo no era así – Naci y me crie en ese país, viví ahí hasta hace un año.
Oficio: “¿Qué es lo que haces? Además de ocupar espacio, respirar mi oxigeno, etc.”
¿Respiras? – Me puse de pie, abriendo los ojos de golpe. Sentí gran curiosidad con ese comentario, como si con ellos buscara entender que cosa era ese ser que estaba frente a mi – P-perdón – Cerré los ojos nuevamente, algo avergonzado. Arreglé un poco mis ropas y suspire pesadamente tomando asiento otra vez – Soy periodista… bueno, era periodista, actualmente me encuentro sin empleo. Espero encontrar algo en la ciudad, aunque… mi condición pone en peligro esa opción.
Personalidad: “¿Cómo actúas? ¿Cómo piensas? Si es que piensas, claro. Solo descríbete.”
Esto… veamos… realmente no estoy seguro de que tipo de descripción puedo darte – Me crucé de brazos, pensando en aquello… ¿que podía decir? – Muchos me han comentado que soy una de las personas más dulces del mundo. Siempre llevo una sonrisa serena, una mirada atenta, palabras de aliento y siempre escucho al resto. Incluso con mis enfermedades parezco tranquilo y positivo. No creo que sea de verdad de esa manera.
Soy un mimado en el fondo, asustadizo, envidioso. Me decepciono con rapidez, mi mente siempre está en la luna y siempre estoy deprimido. Soy astuto y decidido pero tranquilo. Si puedo evitar confrontaciones lo voy a hacer, si debo involucrarme… creo que también lo hare.
Mucho de mi conducta se basa en mis enfermedades; como no son controlables, los cambios anímicos tampoco lo son. No puedo decir en qué momento estaré feliz o triste, solo pasa. A veces solo necesitan un incentivo y tienes todos mis trastornos golpeándome… - Suspiro con pesadez – Por eso te he dicho que no sabía qué tipo de descripción dar. Al final todas son tanto correctas como incorrectas.
Gustos y Disgustos: “Si me haces explicarlo, te enlisto como idiota.”
Me gustan las cosas lindas – Pronuncié embozando una sonrisa – Peluches, decoraciones, dulces… todo lo que pueda entrar en esa categoría. Soy como un niño al que le gusta que le presten atención, que lo consientan y mimen sin reparos.
No me gusta que me digas que hacer o como actuar, a quien seguir o... Bueno, ya sabes, me gusta tomar mis propias decisiones.
Me gusta la fotografía y el periodismo, obviamente. Amo las cámaras fotográficas, incluso tengo la mía, una maravilla de la tecnología, mi fiel compañera. Irremplazable y superior a cualquier otra.
La sangre me desagrada, incluso me asusta un poco. No me gusta que me dejen solo cuando ansío compañía y no me gusta que se me acerque cuando siento que me ahogo. Me molesta que me toquen demasiado, en especial los extraños pero me encanta que me toque ese a quien “amo” – Sabia perfectamente, que como muchos, solo podía ser cosas de una noche o algo cierto, la primera opción era mucho más limitada –
Me gusta mucho escribir, lo que sea, pero escribir –Por instantes viaje a la luna y volví – Me gusta hacerme cortes… en las muñecas u otras partes del cuerpo. Los humanos somos frágiles y en ese lapso, ni siquiera piensa en la sangre que brota de las he… ri… das… - Abrí los ojos de golpe y reí nervioso. Que mal comentario fue ese – Ya es suficiente.
Virtudes y Defectos: “Todos tienen un don, por muy insignificante que sea. Defectos, pfff, hay montones.”
Uhmmmmmmmmmmmmm… bueno… - Me quedé pensando, era difícil dar una auto descripción, en especial porque gozaba de una increíble falta de autoestima – Soy algo impulsivo, muchas cosas me avergüenzan. Confío con facilidad en otros y me dejo guiar por apariencias. Considero que mi escritura sobrepasa el nivel normal de muchos con mi trabajo y mi personalidad puede ser deslumbrante frente a una cámara. No soy bueno con los números pero mis fotografías son perfectas.
Soy infantil. Evito todo tipo de discusión, soy fácil de pisotear y caigo rápido frente a lindas sonrisas. Suelo ser sincero la mayoría de tiempo, las otras omito información.
Soy crédulo y creo que el amor es tanto salvación como la perdición de muchos.
Creo que todo lo nombrado son mis defectos y virtudes, depende de cómo lo mires.
Enfermedades, Tic, Manías o Marcas: “No todos tienen este detallito siguiéndolo~”
¿Lo anotaras? Espero que no – Suspiré pesadamente, no me gustaba decirlo, pero a veces era mejor decir que cosas te siguen… con mi historial, era mejor dejarlas en claro – Sufro de bipolaridad, guiada hacia el polo depresivo. Esta trae muchas consecuencias diferentes, las acciones son variadas y las respuestas aun mas. Mis intentos de suicidio eran enormes, actualmente están mucho más controlados, pero es una especie de manía el cortar mi piel cada noche. Pocas veces entro en la fase maniaca, mi temperamento es una mierda en esa fase. No paro de hablar, soy burlesco, mis vicios se vuelven más fuertes. Soy adicto a las anestesias y otras medicinas, las consumo con frecuencia y durante esa fase en cantidades exageradas. Creo que se sienten tan bien como el sexo.
Obviamente sufro de depresión causada por la frecuente manifestación de uno de los polos nombrados anteriormente.
Sufro de ataques de pánico, a veces nacidos sin razón. Cuando pasa sufro taquicardia, lloro, grito y pierdo la razón y en ocasiones hasta la conciencia.
Creo que… - Me incliné en la silla, jugando con mis dedos – creo que lo más complicado es la enfermedad que fundó la mayoría de mis trastornos. Se le conoce como Ceguera al Movimiento. Arruino mi vida… - Susurré cayendo en cuenta de cuánto había perdido en poco más de un año – Básicamente no veo movimientos. Los objetos estáticos les veo perfectamente pero cuando alguien los mueve, cuando caminan o incluso cuando pestañean, no logro ver el transcurso más si el cambio. Como si las cosas desaparecieran y aparecieran en otra parte. Por eso mismo llevo mis ojos cerrados, para no ser atormentado por esos cambios que poco a poco se vuelven parte de una crisis.
Fetiches: “Uuuuuh… Quiero saber qué tipo de respuesta me darás.”
Mas que un fetiche es una parafilia aceptada clínicamente. Tengo Agrexofilia. Eso quiere decir que me excita mucho mas el saber que hay alguien más escuchando. Adrede subo el tono de mis gemidos.
Tengo veintiséis años, no sé si los aparento o no, pero considero que es lo de menos. Al menos, pienso como un adulto – Asentí, aun con los ojos cerrados, confiado. A mi parecer siempre he sido maduro. Quizás se deba al tipo de conducta que tengo o solo es una mísera suposición -
Cumpleaños: “¿Cuándo comenzó tu existencia? Danos fecha~”
Es el 15 de septiembre – Respondí sin pensar. Era una pregunta normal, no había nada extraño en responderla -
Nacionalidad: “Lugar de Origen, dah.”
Suiza – Sonreí enérgicamente, me gustaba mi país, claro muchos son gritones y tienen un genio de los mil demonios, gracias al cielo yo no era así – Naci y me crie en ese país, viví ahí hasta hace un año.
Oficio: “¿Qué es lo que haces? Además de ocupar espacio, respirar mi oxigeno, etc.”
¿Respiras? – Me puse de pie, abriendo los ojos de golpe. Sentí gran curiosidad con ese comentario, como si con ellos buscara entender que cosa era ese ser que estaba frente a mi – P-perdón – Cerré los ojos nuevamente, algo avergonzado. Arreglé un poco mis ropas y suspire pesadamente tomando asiento otra vez – Soy periodista… bueno, era periodista, actualmente me encuentro sin empleo. Espero encontrar algo en la ciudad, aunque… mi condición pone en peligro esa opción.
Personalidad: “¿Cómo actúas? ¿Cómo piensas? Si es que piensas, claro. Solo descríbete.”
Esto… veamos… realmente no estoy seguro de que tipo de descripción puedo darte – Me crucé de brazos, pensando en aquello… ¿que podía decir? – Muchos me han comentado que soy una de las personas más dulces del mundo. Siempre llevo una sonrisa serena, una mirada atenta, palabras de aliento y siempre escucho al resto. Incluso con mis enfermedades parezco tranquilo y positivo. No creo que sea de verdad de esa manera.
Soy un mimado en el fondo, asustadizo, envidioso. Me decepciono con rapidez, mi mente siempre está en la luna y siempre estoy deprimido. Soy astuto y decidido pero tranquilo. Si puedo evitar confrontaciones lo voy a hacer, si debo involucrarme… creo que también lo hare.
Mucho de mi conducta se basa en mis enfermedades; como no son controlables, los cambios anímicos tampoco lo son. No puedo decir en qué momento estaré feliz o triste, solo pasa. A veces solo necesitan un incentivo y tienes todos mis trastornos golpeándome… - Suspiro con pesadez – Por eso te he dicho que no sabía qué tipo de descripción dar. Al final todas son tanto correctas como incorrectas.
Gustos y Disgustos: “Si me haces explicarlo, te enlisto como idiota.”
Me gustan las cosas lindas – Pronuncié embozando una sonrisa – Peluches, decoraciones, dulces… todo lo que pueda entrar en esa categoría. Soy como un niño al que le gusta que le presten atención, que lo consientan y mimen sin reparos.
No me gusta que me digas que hacer o como actuar, a quien seguir o... Bueno, ya sabes, me gusta tomar mis propias decisiones.
Me gusta la fotografía y el periodismo, obviamente. Amo las cámaras fotográficas, incluso tengo la mía, una maravilla de la tecnología, mi fiel compañera. Irremplazable y superior a cualquier otra.
La sangre me desagrada, incluso me asusta un poco. No me gusta que me dejen solo cuando ansío compañía y no me gusta que se me acerque cuando siento que me ahogo. Me molesta que me toquen demasiado, en especial los extraños pero me encanta que me toque ese a quien “amo” – Sabia perfectamente, que como muchos, solo podía ser cosas de una noche o algo cierto, la primera opción era mucho más limitada –
Me gusta mucho escribir, lo que sea, pero escribir –Por instantes viaje a la luna y volví – Me gusta hacerme cortes… en las muñecas u otras partes del cuerpo. Los humanos somos frágiles y en ese lapso, ni siquiera piensa en la sangre que brota de las he… ri… das… - Abrí los ojos de golpe y reí nervioso. Que mal comentario fue ese – Ya es suficiente.
Virtudes y Defectos: “Todos tienen un don, por muy insignificante que sea. Defectos, pfff, hay montones.”
Uhmmmmmmmmmmmmm… bueno… - Me quedé pensando, era difícil dar una auto descripción, en especial porque gozaba de una increíble falta de autoestima – Soy algo impulsivo, muchas cosas me avergüenzan. Confío con facilidad en otros y me dejo guiar por apariencias. Considero que mi escritura sobrepasa el nivel normal de muchos con mi trabajo y mi personalidad puede ser deslumbrante frente a una cámara. No soy bueno con los números pero mis fotografías son perfectas.
Soy infantil. Evito todo tipo de discusión, soy fácil de pisotear y caigo rápido frente a lindas sonrisas. Suelo ser sincero la mayoría de tiempo, las otras omito información.
Soy crédulo y creo que el amor es tanto salvación como la perdición de muchos.
Creo que todo lo nombrado son mis defectos y virtudes, depende de cómo lo mires.
Enfermedades, Tic, Manías o Marcas: “No todos tienen este detallito siguiéndolo~”
¿Lo anotaras? Espero que no – Suspiré pesadamente, no me gustaba decirlo, pero a veces era mejor decir que cosas te siguen… con mi historial, era mejor dejarlas en claro – Sufro de bipolaridad, guiada hacia el polo depresivo. Esta trae muchas consecuencias diferentes, las acciones son variadas y las respuestas aun mas. Mis intentos de suicidio eran enormes, actualmente están mucho más controlados, pero es una especie de manía el cortar mi piel cada noche. Pocas veces entro en la fase maniaca, mi temperamento es una mierda en esa fase. No paro de hablar, soy burlesco, mis vicios se vuelven más fuertes. Soy adicto a las anestesias y otras medicinas, las consumo con frecuencia y durante esa fase en cantidades exageradas. Creo que se sienten tan bien como el sexo.
Obviamente sufro de depresión causada por la frecuente manifestación de uno de los polos nombrados anteriormente.
Sufro de ataques de pánico, a veces nacidos sin razón. Cuando pasa sufro taquicardia, lloro, grito y pierdo la razón y en ocasiones hasta la conciencia.
Creo que… - Me incliné en la silla, jugando con mis dedos – creo que lo más complicado es la enfermedad que fundó la mayoría de mis trastornos. Se le conoce como Ceguera al Movimiento. Arruino mi vida… - Susurré cayendo en cuenta de cuánto había perdido en poco más de un año – Básicamente no veo movimientos. Los objetos estáticos les veo perfectamente pero cuando alguien los mueve, cuando caminan o incluso cuando pestañean, no logro ver el transcurso más si el cambio. Como si las cosas desaparecieran y aparecieran en otra parte. Por eso mismo llevo mis ojos cerrados, para no ser atormentado por esos cambios que poco a poco se vuelven parte de una crisis.
Fetiches: “Uuuuuh… Quiero saber qué tipo de respuesta me darás.”
Mas que un fetiche es una parafilia aceptada clínicamente. Tengo Agrexofilia. Eso quiere decir que me excita mucho mas el saber que hay alguien más escuchando. Adrede subo el tono de mis gemidos.
Que no se te suba el ego…
“No creo que eso pase…”
Descripción Física: “Como eres a vista, ¿Tienes algo que destaca? Qué sé yo.”
Esto… - reí nerviosamente - ¿Por qué preguntar algo así? No sé cómo responderlo…
Poseo cabellos dorados, finos y largos, ojos rojizos, grandes y comprensivos; no conozco el porqué tienen ese tono tan extravagante. Cejas perfectamente delineadas naturalmente. Mis facciones son algo femeninas pero sin perder el concepto de hombre. Mis labios son delgados y mi dentadura blanca. Mi piel es pálida con tonos rosáceos.
Orejas normales, dedos algo largos. Mi contextura es delgada sin mucho por lo cual sentirse orgulloso. No debo pesar más de sesenta kilos y mi altura no pasa el metro con sesenta y cinco centímetros.
Creo que… así debe estar bien… - sintiendo como mis mejillas se ruborizaban –
Poderes: “Todo tiene un límite. Tú solo puedes tener 3 como máximo. Y recuerda bien, tú no eres Dios, ni tendrás tanta suerte”
¿P-poderes? Debes estar bromeando, ¿No? – Le mire algo perturbado… no puede ser posible, son solo cuentos…. Lo son, ¿No? –Yo no tengo nada de eso.
Extra: “¿Algún datito curioso que quieras dar?”
Estuve en un psiquiátrico hace un tiempo. Tuve suerte al poder salir.
Mascota: “Ni lo preguntes, cualquier cosa que lleves a rastra de manera sumisa puede ser tu mascota, eso creo…”
No podría con tanta responsabilidad en mi condición.
Accesorios: “Lo que sea que lleves como extra contigo. No, tu mascota no cuenta acá”
Nada extra…. Además de las inyecciones de morfina que llevo a todas partes.
Esto… - reí nerviosamente - ¿Por qué preguntar algo así? No sé cómo responderlo…
Poseo cabellos dorados, finos y largos, ojos rojizos, grandes y comprensivos; no conozco el porqué tienen ese tono tan extravagante. Cejas perfectamente delineadas naturalmente. Mis facciones son algo femeninas pero sin perder el concepto de hombre. Mis labios son delgados y mi dentadura blanca. Mi piel es pálida con tonos rosáceos.
Orejas normales, dedos algo largos. Mi contextura es delgada sin mucho por lo cual sentirse orgulloso. No debo pesar más de sesenta kilos y mi altura no pasa el metro con sesenta y cinco centímetros.
Creo que… así debe estar bien… - sintiendo como mis mejillas se ruborizaban –
- Asi Soy:
Poderes: “Todo tiene un límite. Tú solo puedes tener 3 como máximo. Y recuerda bien, tú no eres Dios, ni tendrás tanta suerte”
¿P-poderes? Debes estar bromeando, ¿No? – Le mire algo perturbado… no puede ser posible, son solo cuentos…. Lo son, ¿No? –Yo no tengo nada de eso.
Extra: “¿Algún datito curioso que quieras dar?”
Estuve en un psiquiátrico hace un tiempo. Tuve suerte al poder salir.
Mascota: “Ni lo preguntes, cualquier cosa que lleves a rastra de manera sumisa puede ser tu mascota, eso creo…”
No podría con tanta responsabilidad en mi condición.
Accesorios: “Lo que sea que lleves como extra contigo. No, tu mascota no cuenta acá”
Nada extra…. Además de las inyecciones de morfina que llevo a todas partes.
En fin…
“Me alegra tanto escucharlo – Suspirando aliviado – Aun debo buscar un lugar donde vivir.”
Historia: “¿Qué paso? Ahora prefieres quieres callar, ¿No? Cuéntale al publico tu vida, pequeña rata.”
- Trague saliva. ¿Mi historia? - ¿Estás seguro? – No escuche respuesta del contrario. Suspire una vez más antes de comenzar a hablar –
Nací en Suiza, hijo de madre soltera criado junto a mis abuelos. Siempre supe que sería diferente. No sabía a qué extremo llegaría. Cada día, cada noche, mis abuelos me consentían tratando de mantener lleno el espacio que mi padre debió tener en mi vida. No pensé en él, siempre creí que el día que lo conociera no dejaría de ser un extraño, nunca necesite un padre, sigo sin necesitarlo.
Fui víctima de maltratos y acosos en mi infancia debido a mi frágil actitud. No tuve nunca el valor para defenderme. Al final, era la florecilla de mamá… siempre era ella quien luchaba por mí. Al crecer comprendí que yo debía luchar mis batallas.
Mis buenas calificaciones y excelente comportamiento me llevaron a ganar una beca universitaria, entrando en la carrera de periodismo. Desde siempre ame la lectura y escritura, eran mis hobbies y se convirtieron en mi profesión. Logre viajar por todo el país gracias a la fama que estaba consiguiendo, e incluso llegue hasta Austria, conociendo a quien fue el amor de mi vida. Su nombre era Vash. Lo ame más que a nada, tanto que me fui a vivir con él, lejos de todo lo que era mío. Al principio todo era color de rosas. Nos amábamos tanto… pero, cuando mi enfermedad se detecto todo mi mundo se vino abajo.
Perdí mi empleo, porque me consideraron un posible peligro. Perdí todas las esperanzas de ser alguien en la vida. Me mantenía Vash, a cambio yo buscaba como hacerla labores en casa. Me corte y queme varias veces, hasta que los trastornos aumentaron, convirtiéndome en un problema para él.
Fui internado en un psiquiátrico. De ahí hasta ahora…. Prefiero no hablarlo. La cosa es que ya estoy aquí.
¿Cómo llegaste a la ciudad?: “Confiesa de una vez, ¿Qué te trajo a este basurero?”
Creo que fue una casualidad. Decidí quedarme porque parece un lugar tranquilo y alejado de todo lo que me recuerda lo que alguna vez tuve.
- Trague saliva. ¿Mi historia? - ¿Estás seguro? – No escuche respuesta del contrario. Suspire una vez más antes de comenzar a hablar –
Nací en Suiza, hijo de madre soltera criado junto a mis abuelos. Siempre supe que sería diferente. No sabía a qué extremo llegaría. Cada día, cada noche, mis abuelos me consentían tratando de mantener lleno el espacio que mi padre debió tener en mi vida. No pensé en él, siempre creí que el día que lo conociera no dejaría de ser un extraño, nunca necesite un padre, sigo sin necesitarlo.
Fui víctima de maltratos y acosos en mi infancia debido a mi frágil actitud. No tuve nunca el valor para defenderme. Al final, era la florecilla de mamá… siempre era ella quien luchaba por mí. Al crecer comprendí que yo debía luchar mis batallas.
Mis buenas calificaciones y excelente comportamiento me llevaron a ganar una beca universitaria, entrando en la carrera de periodismo. Desde siempre ame la lectura y escritura, eran mis hobbies y se convirtieron en mi profesión. Logre viajar por todo el país gracias a la fama que estaba consiguiendo, e incluso llegue hasta Austria, conociendo a quien fue el amor de mi vida. Su nombre era Vash. Lo ame más que a nada, tanto que me fui a vivir con él, lejos de todo lo que era mío. Al principio todo era color de rosas. Nos amábamos tanto… pero, cuando mi enfermedad se detecto todo mi mundo se vino abajo.
Perdí mi empleo, porque me consideraron un posible peligro. Perdí todas las esperanzas de ser alguien en la vida. Me mantenía Vash, a cambio yo buscaba como hacerla labores en casa. Me corte y queme varias veces, hasta que los trastornos aumentaron, convirtiéndome en un problema para él.
Fui internado en un psiquiátrico. De ahí hasta ahora…. Prefiero no hablarlo. La cosa es que ya estoy aquí.
¿Cómo llegaste a la ciudad?: “Confiesa de una vez, ¿Qué te trajo a este basurero?”
Creo que fue una casualidad. Decidí quedarme porque parece un lugar tranquilo y alejado de todo lo que me recuerda lo que alguna vez tuve.
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Origen: Afuro Terumi - Inazuma Eleven
Roderick Meier- Humano
- Mensajes : 4
Localización : No importa el lugar, soy libre al fin~
Re: ~Roderick Meier~
Vaya, vaya~ Pero si es un frágil y débil humano -Embozo una amplia sonrisa al ver a tan patética criatura-
Bienvenido a esta horrible ciudad~ Y ten cuidado que hay criaturas peligrosas rondando por aquí... -Comento con ironía dando una pequeña risilla-
Bienvenido a esta horrible ciudad~ Y ten cuidado que hay criaturas peligrosas rondando por aquí... -Comento con ironía dando una pequeña risilla-
Boris Cvetkovic- Lujuria
- Mensajes : 8
Localización : Donde Mmmm.. me gusta con Aaah~
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